Según mi opinión los trastornos mentales no deberían ser
considerados como enfermedades mentales, porque el término de enfermedad se
refiere básicamente a problemas en las condiciones físicas del cuerpo humano,
mientras que los trastornos mentales consisten en patrones diferenciados de
comportamiento humano.
Muchas personas han tratado de mantener la idea de que los
trastornos mentales se consideran como enfermedades mentales separando estos
términos de su vínculo con el cuerpo. De
hecho, se ha enturbiado el concepto de enfermedad, hemos tenido que inventar
nuevos conceptos para referirnos a un trastorno corporal, por ejemplo: Hablamos
de enfermedades orgánicas o enfermedades físicas o enfermedades médicas, por lo
tanto el concepto de "enfermedad". también a veces funciona para
indicar una condición específicamente corporal, en oposición a la
"enfermedad" que se usa más ampliamente.
La otra forma en que las personas han intentado envolver los
trastornos mentales dentro de la categoría de enfermedad es alegando que son
enfermedades del cuerpo, particularmente del cerebro. Todos estamos
familiarizados con esta retórica, que a menudo presenta la idea como si hubiera
sido demostrada de manera concluyente.
Según afirma el psiquiatra, E. Fuller Torrey : "Desde
principios de la década de 1980, con la disponibilidad de técnicas de imágenes
cerebrales y otros desarrollos en neurociencia, la evidencia se ha vuelto
abrumadora de que la esquizofrenia y el trastorno maníaco-depresivo son
trastornos del cerebro".
A pesar de lo anterior, La Dra Joanna Moncrieff afirma: “Estamos
muy lejos de encontrar una patología específica que se alinee con lo que
llamamos esquizofrenia, psicosis, depresión, ansiedad, TDAH, TOC o cualquier
otro trastorno mental que desee mencionar. El hecho de que haya algunas
diferencias sutiles entre las personas con algunos diagnósticos y
"controles normales" en aspectos de la estructura o función cerebral
no demuestra la presencia de una enfermedad neurológica. Ninguno de los hallazgos
es específico o capaz de diferenciar entre una persona que se cree que tiene un
trastorno mental particular y otra que no lo es. El diagnóstico aún se realiza
sobre la base del comportamiento, los pensamientos y los sentimientos que
informa el individuo o quienes los rodean, y que dependen, por supuesto, de los
juicios sobre lo que es "normal" y lo que no.”
Son definiciones contradictorias de dos Doctores en
psiquiatría, según mi opinión estoy de acuerdo con lo segundo, considero por lo
tanto que los que sufrimos de problemas mentales no debemos etiquetarnos como
enfermos mentales, porque el concepto de enfermedad mental es un concepto
errado. Ademas al etiquetarnos como
enfermos mentales le estamos haciendo el juego a personas escrupulosas que se están
beneficiando económicamente al decir que pueden curar a los enfermos mentales.
En mi caso durante mucho tiempo me consideré enfermo de
trastorno bipolar, sin embargo, últimamente he reconsiderado esta definición y
me defino como una persona que ha sufrido problemas mentales cuyas
características concuerdan con la definición de trastorno bipolar anteriormente
llamado trastorno maníaco depresivo, y esta es la etiqueta con que me he
definido de unos años para acá y que también cuenta para mi servicio de salud,
pienso que es posible que me haya servido en algo para saber como atacar y
controlar los sentimientos negativos en periodos de crisis, sin embargo, para
mi esta etiqueta de bipolaridad no la veo como una enfermedad, ni de nada que
me etiquete como un enfermo mental, mi opinión es que son una serie de
características de comportamiento desviado respecto a un comportamiento
promedio y de como manejo mis sentimientos cuando entro en crisis, puede ser
importante clasificar para buscar la mejor forma de abordar el problema al
comparar los síntomas con lo que han sentido otros en condiciones parecidas y
como mediante que protocolos se ha logrado mejorar las condiciones de vida de
los que han pasado por situaciones análogas
Muchas veces las etiquetas se manejan como constructos para
clasificar personas de ciertas características comunes que se definen como una
enfermedad, pero que pueden mas bien un problema temporal al presentar ciertas
desviaciones en los comportamientos respecto a lo que le pasa a la mayoría, lo
de definir a los afectados como enfermos muchas veces se usa para cumplir con
las "METAS" de diagnósticos dentro de un sistema de salud y no para
solucionar los problemas mentales de los afectados.
Hablo respecto a las etiquetas porque cuando uno habla con
diferentes personas y cuando revisa información por la Internet se encuentran
cada vez mas etiquetas para denominar las actuaciones anormales de las personas
respecto a su función mental y es posible que uno piense que puede ser
etiquetado diferentemente y que de pronto por no haber tenido un buen
diagnóstico es que el problema no ha sido bien manejado y no se logra una
adecuada solución
Generalmente los problemas mentales que han sido etiquetados
como enfermedades mentales se tiene definido que no tienen cura como tal, que
son condiciones crónicas y que no tienen una solución definitiva como tal;
aunque se da como solución que si se sigue un tratamiento de por vida,
generalmente farmacológico, las personas estarán la mayor parte de tiempo aliviadas,
he aquí porque es conveniente que las personas afectadas por problemas mentales
sean etiquetadas como enfermos mentales.
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