Loco o bipolar

Diario de una persona que a los 16 de pronto enloqueció, luego a los 40 cree descubrir que es bipolar y en este momento con medio siglo en este mundo, no tiene claro que es lo que tiene.

miércoles, 28 de agosto de 2013

Ahora tengo bastante carga laboral

Dentro de mi desempeño como freelance (que vive del rebusque), he logrado conseguir dos importantes contratos, uno de los cuales requiere tiempo completo en este momento y otro que inicia con poca dedicación, pero que también puede convertirse en dedicación de tiempo completo en un corto plazo, estoy entonces en una encrucijada, hace poco no tenía si no un trabajo a medio tiempo, que me hacía sentir bien, equilibrado, productivo, útil y de un momento a otro debo soportar una carga laboral mas grande, tengo que ser capaz, porque esta oportunidad no la tenía hace mucho tiempo, además creo que he estado estable por un tiempo largo, de pronto subo o bajo algo, pero no tanto que afecte mi desempeño diario, espero eso si que esta situación no desencadene en una crisis, no lo creo y haré de mi parte lo que sea para que esto no suceda.

En este momento siento que estoy del lado de la manía, osea hipomaníaco, pero aún asi, tengo que desempeñar mis labores, lo cual es complicado, pues tengo que luchar contra la razón engañosa a la que muchas veces me lleva la tendencia a la manía, como creer que tengo la razon siempre, cuando estoy muy hacia la manía me cierro en decisiones que muchas veces no son buenas, porque según mis razonamientos estoy siempre en lo correcto, (aunque es posible que lo este), pero mi forma de actuar es precipitada.


jueves, 22 de agosto de 2013

La inteligencia emocional y el trastorno bipolar

Leyendo sobre lo que muchos llaman la inteligencia emocional, encontré datos y detalles importantes tanto desde el punto de vista de quienes sufren bipolaridad, como de otras personas expertas o no en problemas de la mente.

Analizando mi caso como persona afectada del trastorno bipolar y mi relación con los demás, esta puede verse muy afectada y afectar por lo tanto mi inteligencia emocional, que se define como la capacidad de relacionarse socialmente de forma efectiva con otros y poder desempeñar labores que requieren de estas interacciones para triunfar en determinado campo.

La inteligencia emocional se puede definir como la capacidad de adaptarse muy bien en un entorno social y sobresalir en este, sin ser el mas inteligente en otros aspectos como las capacidades matemáticas, linguisticas, científicas, etc,...

Muchas veces quien tiene mas inteligencia emocional es el que triunfa en los negocios, en los aspectos de liderazgo empresarial, político o religioso.

Tener una alta inteligencia emocional consiste en ser mas sociable y saber aprovechar esta sociabilidad para desempeñarse mejor en sus quehaceres.

¿Cómo afecta un problema como el trastorno bipolar a la inteligencia emocional de una persona? Quién sufre de trastorno bipolar, cuando esta en situaciones de crisis puede tener problemas serios de adaptación social, osea que su inteligencia emocional sera baja, porque cuando la tendencia emocional es hacia la de manía, se es mas impulsivo, acelerado, poco diplomático, obstinado, por lo que se tratará de hacer muchas cosas, la mayoría de las veces sin contar con la ayuda o participación de otras personas, puede que esta forma de actuar llegue a ser ser efectiva, en casos donde socialmente impera el autoritarismo, pero en otros casos provocaría un rechazo entre el grupo y socialmente no se podría sobresalir, ni llegar a tener lo que se define como inteligencia emocional. Si se esta en el lado contrario, el de la depresión, se tratará de estar aislado, de participar poco en cuestiones sociales, se tomarán actitudes negativas, por lo que ante el grupo se vera como una persona poco sociable, por lo que desde el punto de vista de inteligencia emocional esta tampoco será buena.

Para alguien afectado por el trastorno bipolar solo cuando se esta estable, se podrá tener una inteligencia emocional alta o baja, dependiendo de que la persona como tal tenga las cualidades para serlo como parte de su personalidad.







Grandes aspiraciones

Las grandes aspiraciones o los grandes deseos, eso de querer llegar a ser alguien grande, es algo que en la mayoría de los casos causa gran frustración, se sea o no bipolar, es una situación que se nos ha vendido en la filosofía actual, la que nos venden los medios de desinformación, pero no todo el mundo puede llegar a ser lo que aspira y mas si lo que se quiere son metas muy grandes (como ser muy famoso, muy rico, muy importante, muy poderoso), pues estas metas solo las alcanzan unos pocos, que llegan allí la mayoría de las veces, no porque lo han querido, si no por ventajas externas o por cuestiones del azar, sin embargo, para la mayoría que tienen estas metas, nunca las van a alcanzar, se convierten entonces en fuente de estrés, que no permiten llevar una vida plena.

miércoles, 21 de agosto de 2013

Sobre mi estadía en una institución mental y mi recuperación.

Recordar y escribir sobre tiempos pasados es bastante difícil, dado que la memoria sobre hechos vividos hace muchos años pueden contaminarse con situaciones que de pronto no fueron como uno las tiene en su mente, como también cuando uno las cuenta tiende a adornarlas por lo que es posible que con ese fin pueda también distorsionar lo que fue realmente la realidad, sin embargo, voy a tratar de contar sobre lo que fue mi estadía en una clínica de salud mental y lo que esta implicó para mi evolución posterior.

Estuve internado en una institución mental, una clínica privada que de salud mental la cual muchos denominan en estos lados clínica de reposo, la cual era muy diferente a las instituciones publicas de salud mental que en esos días y todavía aún se denominan manicomios, a la cual fui llevado cuando tenía 16 años, de donde afortunadamente salí mejor de lo que entré, a partir de esta experiencia empecé a sentir que tenía problemas mentales, los cuales no me han abandonado, pero que gracias a muchos factores he podido sobrellevar y he logrado vivir como cualquier parroquiano.

Haciendo un recuento con base en mis recuerdos de lo que fue mi estadía en la institución mental que me atendió cuando tuve mi primera y mas fuerte crisis de mi trastorno bipolar puedo decir entre otras cosas lo siguiente:

Mi llegada se dio porque mi situación mental era bastante crítica, llegue a un estado de psicosis fuerte donde no tenía claro la realidad, estaba en una etapa de manía fuerte, que desemboco en un estado de perdida de la noción de la realidad, mi estado de ánimo era bastante exaltado, tenía un sentimiento de felicidad que nunca volví a experimentar, creía que estaba dotado de superpoderes, no como los superamigos, si no desde el punto de vista de conocimientos, tenía ideas que para mi concepto podían cambiar los paradigmas filosóficos, que permitían resolver infinidad de temas tecnicocientíficos, en conclusión era capaz de pensar como en su tiempo lo hicieron Aristóteles o Platón o en la época actual como lo hace digamos Stephen Hawkins o como lo hizo Einstein en su momento.


Mi mente era como un caleidoscopio



Era tanta mi desconexión con la realidad y tan evidente a la vista de los demás, que mis padres acudieron donde un médico amigo el cual no tenía especialidad en psiquiatría, pero si el conocimiento básico de como se deberían tratar los trastornos mentales, este médico descartó que estuviese drogado o en estado inducido por drogas suministradas por otros como lo es la escopolamina, muy de boga en esta zona  y que se consigue fácilmente en cualquier potrero, este descartó estas posibilidades y dio un diagnóstico de que estaba afectado por un problema mental, que no puede determinar exactamente cual es, pero que dijo: Puede ser tratado sin muchos problemas y dejar a la persona en condiciones iguales a las que se tenía antes de presentar la crisis, este realizó la remisión con un psiquiatra de la capital provincial a donde fui llevado.

Una vez pasada la entrevista inicial con el psiquiatra, este determinó que debía ser hospitalizado de inmediato, así no fuera de mi aceptación; a pesar de no estar muy consciente, ni muy aterrizado en la realidad, no me acuerdo de haber contrariado esta decisión y acepte ser internado o eso es lo que me parece que sucedió.

Sobre la estadía en la institución mental que me atendió tengo vagos recuerdos, por el tiempo que ha pasado desde que estuve en este sitio unos 30 años y porque desde que llegue empecé a recibir unas fuertes dosis de hipnóticos y antipsicóticos, en resumen pasé dormido por mucho tiempo y los pocos minutos en los que estaba despierto me comportaba como un zombi, donde mis movimientos eran pesados y mi mente poco funcionaba, me acuerdo que en una oportunidad cuando estuve algo mas despierto, que hablaba con los enfermeros y con otros pacientes, exponiendo mis ideas delirantes, después de otro tiempo de oscuridad volví a interactuar con otras personas de la clínica ya de una forma mas coherente, me acuerdo de los últimos días donde estuve como en una especie de terapia de grupo, principalmente de una noche, cuando intercambie opiniones con otras cuatro o cinco personas mas que estaban en situación similar a la mía o que ya habían salido en remisión, pero que volvían como apoyo de pacientes internados, donde cada uno hablaba de su experiencia y porque estaba o había pasado por esa clínica de salud mental.

Uno de los que participó en esta reunión de grupo, contó su experiencia bastante difícil, que por estar en estado maníaco y a la vez tener problemas de alcohol y drogas, cometió muchas locuras como se dice coloquialmente, una de ellas lo llevo a sufrir un fuerte accidente que lo dejo cerca de la muerte, dejándole como secuela definitiva la pérdida de una de sus extremidades inferiores; su estancia en la clínica le permitió superar el trauma del accidente, como también superar su problema de dependencia, por lo cual estaba muy agradecido con todas las personas que lo atendieron.

Me acuerdo vagamente de mi compañero de cuarto, era un señor maduro unos 40 o 45 años, que trabajaba con una empresa portuaria, el cual estaba internado para superar el alcoholismo, no hablé mucho con el por mi situación mental, como también por la diferencia de edad, en esos días yo era un adolescente de 16 años.

Después de salir de la clínica sentí que mi capacidad mental disminuyó mucho y con la idea no se si real, que mi enfermedad y/o la droga que recibí me produjeron daños en mi cerebro, que pude haber perdido muchas neuronas y por consiguiente tener deterioro neurológico, sin embargo, después y en este momento llego a la conclusión que esto pudo haber sucedido, pero lo que viví fue un mal menor, comparado si no hubiese sido contenido por la hospitalización y el tratamiento médico, que fue pasar la crisis confinado y drogado, dado que de no ser tratado como lo fui, la crisis psicótica pudo seguir por mas tiempo causando mas daño neurológico, lo mas probable es que hubiese presentado una remisión espontánea, pero en esta situación o después de este llegar a tener mayores problemas, como caer en dependencias como drogas psicoactivas o en el alcohol.

Pienso que llegue a una situación difícil y critica, pero que logré superar, también que lo que pase fue lo mejor aunque no haya sido muy agradable que digamos.

Después de salir de la clínica seguí fuertemente medicado pero en mi casa, empece entonces a pasar por un episodio de fuerte depresión, el cual por desconocimiento achaqué a los medicamentos que me recetaron,  pero que se debió al rebote normal de mi enfermedad, en ese momento no se me explicó como me afectaba mi enfermedad, si no que simplemente se me dijo que estaba enfermo y que debía cumplir el tratamiento medico porque si y punto, por eso es que tome los medicamentos por un tiempo mas, hasta que los deje de tajo, sin importar lo que pasara y afortunadamente no paso mayor cosa, pues poco a poco volví a recuperar mi forma de ser normal, llegue a creer que me había curado, pero años después volví a sentir que mi enfermedad reaparecía.




sábado, 3 de agosto de 2013

De nuevo en una rutina

Estoy de nuevo en una etapa de rutina laboral que trae una rutina social, hace mucho tiempo no vivía esta situación, tengo un empleo que aunque es a tiempo parcial requiere de una interacción laboral fuerte, por lo que estoy en un grupo de trabajo, esto hace que tenga que coordinar labores con este y fuera de este con otros empleados de la institución donde laboro, para mi ha sido bueno pues adicional a la mejora sentida con la última medicación que estoy llevando, me sirve como adaptación social y me ayuda a tener una estabilidad emocional que de pronto no tenía cuando alternaba periodos de labores cortas con periodos de inactividad laboral.  Claro que me siento algo explotado pues a pesar de ser a tiempo parcial el tiempo que estoy dedicando a veces se acerca al de tiempo completo, claro que mis compañero que laboran a tiempo completo trabajan como el doble de horas de este; cosas de la situación económica y laboral que toca muchas veces soportar.

No he dedicado por lo tanto un tiempo para leer sobre mi problema y por lo tanto no he tenido suficiente inspiración para escribir a este respecto, adicionalmente no tengo que contar de desbalances pues no subo ni bajo de ánimo, solo vengo sintiendo las alegrías o tristezas que me provoca la vida.

Tengo por comentar la situación del libro de 12 personajes literarios analizados por psiquiatras sobre todo en el capitulo donde trata al personaje de 100 años de soledad José Arcadio Buendía, que lo ubica muy bien como afectado por esquizofrenia, según el psiquiatra que lo analiza, de acuerdo con las condiciones de su enfermedad, en la actualidad podría haber sido tratado cuando empezaron los primeros síntomas y es hasta posible que pudiera llevar una vida muy aproximada a la normal, lo único es que como tal no hubiese sido interesante como historia para contar en un libro. Algo similar le paso al científico John Nash que desarrollo esta enfermedad, sin embargo, logro superarla, gracias a los nuevos avances y a su propia voluntad.

En la actualidad es posible tratar y mejorar la vida de muchas personas que sufren de problemas de la mente ejemplos hay muchos, por lo que me siento optimista al respecto.