lunes, 25 de abril de 2022

He aprendido a convivir con la bipolaridad



En estos momentos me encuentro mejor, saliendo adelante con mi vida, considero que he superado el duelo que implicó la tragedia que afectó a mi ex pareja, como el hecho de separarme, decidí fluir, alejarme de una situación que no me hace bien y seguir mi vida por un nuevo camino.

De nuevo estoy en una relación, he encontrado de nuevo un amor y he de seguir, la vida ha de continuar, todavía tengo ganas de vivir, siento que puedo hacerlo, convivo con mis problemas diarios, pero disfruto de compartir con personas que quiero, de saber que he hecho muchas acciones por mi vida, como también, por la vida de otros, aunque he sufrido por culpa de las vicisitudes del hecho de estar vivo, es una situación que considero natural; como pienso que la vida es una ratico, que aquí se viene a vivir y a morir, entonces se disfruta de la compañía de las personas cuando están y se añora a los que no están, mientras se ha de continuar hasta el final.

Respecto a mi dolencia del trastorno bipolar, ahí esta, no se ha ido, se que no se irá nunca, estoy en una etapa donde tengo desbalances pero son relativamente suaves, (porque mi experiancia los hace ver asi), donde puedo estar varios días de pronto una semana o hasta dos en un animo estable, pero luego vuelvo a tener oscilaciones de ánimo, tengo cortos periodos donde me voy un poco arriba por un día, máximo dos y la paso bien, para luego sufrir el rebote donde estoy también uno o dos días con el animo bajo, hasta que vuelvo a la estabilidad, en estos momentos la paso sin tomar medicamentos, comparando: Cuando tomaba medicamentos realmente no lograba evitar los desbalances, mas bien me mantenía en un estado de somnolencia, me sentía apagado, para cuando venían los desbalances estos eran mas fuertes, además de sentir los efectos primarios y secundarios de los medicamentos. Cuando no tomo medicamentos los desbalances son mas suaves además que no tengo sus efectos indeseables.

Considero que para mi fortuna he podido vivir la bipolaridad a mi manera, logrando convivir con este problema sin dañarme y sin afectar a los demás. Lo que vengo haciendo con mis imaginarios o mis fantasmas como los llamo, es que a pesar de sentirme el más poderoso en la manía, se que no lo soy por lo que no actúo como si lo fuera; al contrario cuando me siento el ser mas infeliz, se que esto no va con mi realidad, se que puedo seguir viviendo de buena forma cuando supere el bajón. 

Los fantasmas o mi manera de ser bipolar siempre estará ahí pero he aprendido a vivir bien y a comportarme de acuerdo con lo que se acostumbra para poder compartir socialmente con los demás, sin mayores inconvenientes. 

Dentro de este convivir actual no incluyo la medicación, acepto que ha sido un apoyo en momentos críticos y reconozco que me ha servido, pero en un día a día se convierte en otra carga, más que en un mecanismo estabilizador como dicen muchos.